Hoy, en el Día Mundial del Sueño, queremos sumarnos a la causa y dar valor al hecho de dormir bien. Es importante que la población sea consciente para que pueda mejorar su bienestar.
Dormir no es solo cerrar los ojos y que llegue un nuevo día. A nivel general, no prestamos la atención suficiente al acto de descansar cuando, en realidad, es una parte fundamental para mantener nuestro bienestar, acompañado de una dieta equilibrada y de ejercicio físico. Un descanso óptimo es garantía de bienestar físico, cognitivo y emocional.
Tener un sueño reparador y de calidad ayuda a que nuestro cuerpo se recupere y reinicie. Si no se consigue dormir bien y lo suficiente se será más propenso a la obesidad, a problemas cardiovasculares, trastornos en el sistema inmunológico, cambios en el estado de ánimo y problemas en la concentración y la memoria.
Es por eso por lo que la OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda dormir una media de 8 horas, en el caso de los adultos. El sueño nocturno es más reparador que el diurno, por eso es normal que las personas con jornadas laborales de noche tiendan a estar más cansadas y con mayores trastornos digestivos.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE DORMIR?
- Para regular nuestro metabolismo
Durante el descanso se equilibran las hormonas que controlan el hambre, la leptina y la grelina. Si dormimos poco o mal, se segregará más grelina, indicando al cuerpo que se tiene hambre y, por tanto, aumenta nuestro apetito. Por el contrario, cuando descansamos correctamente, se mantiene la balanza de dichas hormonas y nos sentimos más saciados.
- Para un mejor rendimiento
Descansar prepara al cerebro para aprender y retener información, favoreciendo la concentración y la creatividad. Cuando hay deficiencia de sueño pueden experimentarse episodios en los que el cerebro se duerme de manera inconsciente, lo que puede provocar, por ejemplo, un accidente de coche.
- Para evitar posibles enfermedades cardiovasculares
Cuando nuestro sueño no es bueno, aumenta la adrenalina y cortisol, hormonas relacionadas con el estrés, lo que puede provocar un aumento de la tensión arterial y la frecuencia cardiaca. Sin embargo, si conseguimos un descanso de calidad, disminuye la presión arterial y nuestro sistema circulatorio necesitará menos esfuerzo para bombear la sangre.
¿CÓMO PODEMOS CONSEGUIR UN BUEN DESCANSO?
- Elegir un colchón y almohada adecuados, que sean resistentes y de calidad.
- Seguir un horario para irse a dormir y despertarse, así como con las comidas.
- Evitar cenar pesado y, a poder ser, que sea 2 horas antes de acostarse. No consumir bebidas estimulantes como el café o alcohol.
- Realizar 30 minutos de actividad física, mejor si no es antes de dormir.
- Desconectarse de los aparatos electrónicos antes de acostarse. Aconsejan 2 horas antes porque la luz de éstos influye en el ciclo del sueño, ya que afectan en la segregación de la melatonina, la hormona del descanso.
- No alargar la siesta más de 20 minutos.
Después de este resumen, desde Dolce Confort esperamos que a partir de ahora des más importancia al descanso de calidad y cambies los hábitos necesarios para garantizar tu bienestar. Puedes empezar consultando nuestros colchones y almohadas para elegir el que más se adecúe a ti.